
Durmiente
Con los párpados derretidos
Las manos quietas
En paz.
La boca susurrando el
beso que nunca diste.
Durmiente
Me quedé esperando la hora 28
Del día
Entre la noche y el amanecer
Mi cuerpo se desliza escapando
Y arañando el tiempo.
Durmiente
Cuando abras la puerta has de encontrarme
Demasiado pronto para reprenderme
Demasiado tarde para despertarme.
Durmiente
He de resistir tu presencia
Que no es sino ausencia
Que no abriga sino congela mis pasos.
Durmiente
He de exterminar las flores que
Nacieron de tu cuerpo
He de callar el baile de sus
Pétalos y liberar al pájaro
Embrujado.
Durmiente
Has de recordarme
Has de evaporarme.
He de quedarme
En los brazos del silencio
En el canto de la noche
Y el falso baile de
Nuestros días.
Durmiente.
Jc.