domingo, 11 de abril de 2010

Extracto de “Nosotros que fuimos todo” (Jc.)


Él:(Mirando a través de la ventana)
Yo el mediocre, la mitad de un hombre.
El árbol que no da frutos utilitaristas.
El hombre sin cartón.
El hombre de mil pegas a la vez.
El hombre que traiciona.
El hombre que es traicionado.
El hombre que amó y se perdió.
El hombre de nieblas y malas juntas.
El hombre que suda al dar la mano.
El hombre con vergüenza.
El hombre que recuerda.
El hombre que grita: ¡Estoy vivo!

Y te sufre a ti entera:
Ciudad de cemento y fierro.
Ciudad de mentiras y aduladores.
Ciudad de artistas y cardúmenes odiosos.
Ciudad de compromisos y corbatas.
Ciudad de reverencias y corporaciones.
Ciudad de Ministerios y facturas.
Ciudad de tiendas y créditos.
Ciudad depravada y despiadada.
Ciudad de tiempo y encierro…

/A ti te declaro mi odio.
A ti de calles oscuras y pasajes inciertos.
A ti de escaleras eternas y encuentros fortuitos.
A ti de plazas violentas.
A ti de niños puñeteros y prodigios demagogos.
A ti mi cuna.
A ti mi odio: A ti resisto.

Jc.

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